Civilización China
La civilización china fue una de las más influyentes para el continente asiático y para el resto del mundo. Esta, ubicada originalmente en las cercanías de los ríos Amarillo y Azul, logró progresar rápidamente gracias a sus fértiles suelos y al favorable paisaje natural, sin contar su admirable sed de progreso y creatividad.
Los grandes ríos que cruzan China son dos: el Hoang-Ho (río Amarillo) y el Yang-tse-Kiang (río Azul). Ambos ríos surgen de las montañas de Tibet y desembocaban el Mar Amarillo.
- Presencia de climas muy variables gracias a la extensión territorial.
- Gran diversidad, tanto en agricultura como en fauna.
- Posee un suelo fértil, por lo cual favorece y enriquece la agricultura (cultivos de arroz, moreras, caña de ázucar, té, trigo, etc).
- Labores mineras (yacimientos de cobre, oro, hierro y plomo).
China nunca ha sido un país muy religioso, puesto que se basaban tanto en el confucionismo, como en el taoísmo y/o el budismo, considerados más bien filosofías que regían el modo de vida y conducta de los ciudadanos.
Arte
Los chinos desarrollaron grandes aportes a las artes, tanto en la arquitectura, la pintura, la literatura, la escritura y las telas.
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